SALAMANCA - SANIDAD
Miércoles, 24 de Mayo de 2023

El Centro del Cáncer de Salamanca investiga el desarrollo de un nuevo fármaco mediante inmunoterapia de precisión

ICAL - El proyecto se está desarrollando gracias a la concesión de ayudas públicas a proyectos de colaboración público-privada con 670.000 euros de presupuesto

El Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca lleva a cabo un proyecto de investigación para el desarrollo de un nuevo fármaco mediante inmunoterapia de precisión. Así lo explicó este jueves el doctor Atanasio Pandiella, investigador principal del CIC y responsable de la iniciativa presentada hoy en rueda de prensa junto al consejero de la compañía Oncomatrix, Pedro Esnaola, y la directora de I+D, Myriam Fabre, así como el vicerrector de Investigación de la Usal, José Miguel Mateos Roco.

El proyecto, titulado ‘Inmunoterapia de precisión con anticuerpos Bi- Específicos Acopladores De Células T. Dirigidos al microambiente tumoral para el tratamiento de tumores sólidos invasivos -Omtx2305’ se está desarrollando gracias a la concesión de ayudas públicas a proyectos de colaboración público-privada, dentro del Programa Estatal para Impulsar la Investigación Científico-Técnica y su Transferencia, del Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación 2021-2023, y en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Ministerio de Ciencia e Innovación. 

La investigación se basa en la colaboración de una entidad privada, en este caso Oncomatryx, con la pública Fundación de Investigación del Cáncer de la Universidad de Salamanca, y es, según Pandiella, “una demostración del valor de la colaboración público—privada para afrontar problemas médicos”. 

Ambas entidades llevan colaborando varios años en distintos proyectos de investigación y dicha cercanía se está consolidando mediante esta iniciativa, dotada con una financiación de 670.000 euros. “Es un orgullo trabajar con una empresa enteramente española que está compitiendo internacionalmente”, señaló Pandiella. 

Del mismo modo, Pedro Esnaola, quien hizo hincapié en las “grandes instalaciones” del Centro de Investigación del Cáncer, comentó que, dentro del proyecto se están generando “sinergias” al combinar la experiencia de la biotecnología aportada por Oncomatrix con la experiencia del laboratorio dirigido por el doctor Pandiella en la biología molecular del cáncer y las infraestructuras del espacio como el servicio de Patología Molecular Comparada.

La investigación trata de desarrollar un nuevo fármaco que se dirige a una proteína que se produce en el ambiente tumoral. El fármaco se basa en un anticuerpo frente a esa proteína, que se denomina FAP. Cabe destacar del proyecto que se va a utilizar bioingeniería de anticuerpos para producir uno modificado. En concreto, ese anticuerpo modificado consta de una parte que reconoce a FAP y de otra parte que actúa de “imán” para el sistema inmunitario. 

“La idea es que el anticuerpo lleve a cabo una doble función antitumoral. Por una parte, reconociendo a FAP y actuando sobre esa proteína. Por otra parte, atrayendo a células del sistema inmunitario al tumor para que lo ataquen”, explicó Pandiella. “El abordaje en la investigación del microambiente es crucial, ya que en los últimos años se han acumulado evidencias de la importancia que tiene el estroma, el entorno celular, para diseñar estrategias contra los cánceres invasivos”, indicó.

En este trabajo, toda la ingeniería del anticuerpo está siendo desarrollada por Oncomatrix, mientras que la labor del equipo del Centro de Investigación del Cáncer se centra en todo el abordaje de la biología molecular. En concreto, mediante los análisis de muestras con técnicas empleadas en patología molecular que persiguen desarrollar biomarcadores para identificar a los pacientes sensibles para recibir el tratamiento. 

Además, desde el punto de vista socio-sanitario, “es altamente satisfactorio observar que el esfuerzo de ambas entidades, colaborando estrechamente, puede llegar a beneficiar a pacientes con cáncer”. Otro de los aspectos importantes para de Castilla y León, derivado de este proyecto, es la capacidad que ofrece de “atraer talento y juventud”, además de “contribuir a su desarrollo tecnológico”. De hecho, en la actualidad el laboratorio de Atanasio Pandiella cuenta con diez personas y ocho de ellas se han trasladado a trabajar a Salamanca.