“Lo que importa no es un columpio más o menos, es la infancia y las risas que genera”. Así ha concluido su intervención José Antonio Diez, alcalde de León, en el acto de descubrimiento de una placa conmemorativa en el Parque de Los Antepasados. Este espacio de juego y convivencia de la avenida de Asturias no tenía ni siquiera nombre en el nomenclátor de la ciudad, lo que ha sido solventado gracias a la iniciativa de una vecina de la zona que contactó con Alcaldía.

“Me reuní con Laura y con otras madres y me transmitieron todo lo que este pequeño parque significaba para ellas. La ilusión con la que me hablaron de las meriendas aquí, de su infancia, de los abuelos y abuelas que traían a sus nietos y cómo me dijeron que solo necesitaban algún elemento de juego. Me convencieron, me emocionaron. Su parque era su infancia y querían que lo fuera para sus hijos”, ha relatado el alcalde de León en un encuentro celebrado con los vecinos en el ya Parque de Los Antepasados, denominación que llegó respaldada por el Ampa (Asociación de Madres y Padres de Alumnos) de Las Anejas, desde el que solicitaron dar una denominación al espacio.

El nombre del parque se debe a que en el terreno que hoy ocupa estuvo ubicado el cementerio municipal “y querían que fuera un homenaje a sus abuelos, a los leoneses que un día reposaron aquí. O que, mejor, a quienes un día disfrutaron aquí”. “El Parque de los Antepasados ya es una realidad y lo es gracias a la ilusión que supisteis transmitir, de vuestras ganas de hacer ciudad que se unieron a las mías”, ha expresado José Antonio Diez este viernes a los vecinos de la zona. “Gracias por la ilusión que me habéis transmitido y por conservar vuestros recuerdos y querer que pasen a vuestros hijos e hijas. Mi gratitud por recordar que más allá de un presupuesto o un arreglo están cosas tan importantes como el mantenimiento del legado y la vecindad, hacer pandilla en el parque y querer volver a él”, ha incidido.