El PSOE de Ávila denunció hoy la situación de los pacientes de hemodiálisis en Ávila y cuestionó la gestión sanitaria de la Junta, principalmente por su “profunda preocupación y perplejidad” ante las declaraciones del presidente, Alfonso Fernández Mañueco, en las que “se atribuía una supuesta medalla de plata” en esta materia, “afirmaciones que contrastan frontalmente con la realidad que viven a diario numerosos pacientes de la provincia, especialmente quienes necesitan tratamiento de hemodiálisis”, según un comunicado recogido por Ical.

Durante las últimas semanas se han conocido las quejas de pacientes de nefrología que, por encontrarse desplazados en Ávila, “ya sea por visitas familiares, periodos vacacionales o estancias temporales, no pueden recibir tratamiento de hemodiálisis en el Hospital Nuestra Señora de Sonsoles”, con lo que “se ven obligadas a desplazarse a Medina del Campo, Béjar o incluso fuera de la Comunidad, a Talavera de la Reina, para poder continuar con un tratamiento vital”.

El PSOE señala que la Unidad de Hemodiálisis del Hospital Nuestra Señora de Sonsoles “resulta claramente insuficiente” para el número de pacientes existentes en la provincia; y citan las declaraciones del exjefe de sección de Nefrología del centro en septiembre, cuando señaló que la unidad “sigue contando con el mismo número de puestos y únicamente dos turnos de tratamiento, prácticamente sin cambios desde finales de los años 90”.

Actualmente, muchos pacientes de hemodiálisis residentes en la provincia no son atendidos en el Hospital de Ávila. El centro únicamente da cobertura a los pacientes de la capital y su área de influencia, incluida la zona de Alberche-Pinares. Los pacientes de las zonas de Gredos, Piedrahita y El Barco son derivados a Béjar, mientras que los del Valle del Tiétar deben desplazarse a Talavera de la Reina, según señaló el PSOE.